7. Plan MITIGA en Casa
“Lo que no se registra, se pierde. Lo que se observa con método, se anticipa”
La historia de María (y su sensación de vivir siempre a ciegas)
María cuida a su padre con la enfermedad de Alzheimer. Se informa, asiste a charlas, lee mucho. Pero cuando ocurre una crisis —una noche sin dormir, un cambio de conducta, una caída— no sabe cómo actuar ni explicarlo al médico.
Sabe mucho, pero le falta estructura.
Errores frecuentes cuando no hay plan
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Confiar en la memoria bajo estrés.
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Registrar de forma desordenada o incompleta.
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Dejar que cada cuidador “haga a su manera”.
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Llegar a la consulta sin datos, solo con intuiciones.
Lo que MITIGA propone mirar de otro modo
No se trata de anotar todo, sino de tener una rutina sencilla de observación.
MITIGA propone dedicar 15 minutos semanales a revisar qué ha cambiado y la respuesta del paciente.
No es burocracia. Es prevención. Es la diferencia entre vivir a la defensiva o anticiparse.
Qué puedes hacer esta semana
- Elige un día fijo de revisión semanal.
- Anota al menos un cambio importante.
- Comenta lo observado con quien más convive con el paciente.
La pregunta que cambia la lógica:
“¿Tengo constancia real… o estoy confiando en mi memoria bajo presión?”
Lo que MITIGA te recuerda
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La memoria del cuidador es frágil bajo estrés.
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Lo que se registra bien, se interpreta mejor.
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Observar con método cambia el rumbo del cuidado.